
Su recuerdo atrevido toca a las puertas de los ambiguos y
difusos palacios perdidos de mi conciencia
como gerrero forastero e inesperado
con la seguridad de quien sabe adonde va,
aunque antes no haya ido...
Y antes que se desvanezcan estos, como la ciudad de Shamballah,
el Titan traspasa las puertas de oscuras murallas y claros pastos
y se interna en las periferias, en aquella humilde aldea de los sueños...
Pude ver claramente su cara picara, perfectamente en calma
y grandes ojos abiertos con su mirada fija en un objeto distante invisible,
situado en algun lugar en el espacio debajo de mis cejas...
encima y a los lados de mi nariz...
mi alma no corrió, parecia vivir el mismo sueño,
procedia a saltos, aunque dormia. Parecia como si hubiese sido dotada
de la elasticidad de una pelota y rebotaba cada vez que
sus manos tocaban mi piel...
sus caricias tenian la regularidad de un preludio...
la habilidad de materializarse y desaparecer,
y volver a materializarse sin esta vez desaparecer...
sino, renacer...
Aun sin entender como antes no pude notar
el exquisito color de su piel, entre tanta gente descolorida,
y aquellos hermosos lunares estrategicamente ubicados
como vistosas estrellas en el cielo lozano y calido de su suave piel,
de perfume narcótico que acelera las palpitaciones desbocadas de
unas emociones adictivas como una tormeta en el pecho que no sabe
como salir y me quita el aire... que vuela bailando
aleteando frente a mi..y apenas...
le puedo tocar...
( to be continued..)