Febril (continuacion de la saga)

La noche cubre amorosamente la ciudad con su manto
de oscuro terciopelo,bordado de unos cuantos pequeños
cristales brillantes, algunos parpadeantes, otros
alineandose en diversas formas.
Aunque no como lo habia planeado, todo transcurria con
aparente normalidad, pero me he equivocado nuevamente
al creer en la conformidad de que, a pesar de todo
(ausencias, depresiones, inseguridades, sentimientos
compartidos, autoengaño, conflictos internos y externos,
melancolia, entre otros reperperos) nos seria mas
feliz de lo que ya era, de alguna manera hizo que valiera
la pena cada maldito segundo.

Dos palabras bastaron para mover al sol de su lugar
y por el segundo mas diminuto olvide quien era yo..

En un silencio que me parecio infinito, como el
silencio enamorado de aquella sonrisa y su mirada tierna
que sin saberlo me rescato de tanto...
El dolor de la lengua atascada, senti poder y miedo,
para poder sobrevivirme a la emocion, me sumergi en
mis adentros como quien duerme para evadir, para protegerse.

Me atrapa un incesante mareo cuando parada estuve
en el borde de aquel abismo ciego, harta del vertigo,
y del juego cruel de mi mente y sus interminables
interrogantes que no me permiten distinguir la realidad
de entre tanta ilusion y que deja en mis adentros un
sentimiento de fatalidad, ahi fue cuando decidi resolverme
en un salto al vacio para culminar asi con la
hiperactividad febril de mi mente, victima de aquel
estimulo inesperado, percibido por mis sentidos auditivos...



Y despues las lagrimas cayeron...
Surgió mi destino.